Leo Bosio es uno de los creativos más inquietos del teatro musical independiente. Hoy presenta su nuevo trabajo, Borracho, un after musical (perderse para encontrarte) , una intervención teatral-musical. "Es una comedia romántica donde una pareja se separa y otra se está por conocer. Es una intervención teatral musical dentro un recital, basada en la fluctuación universal de las personas entre el amor-desamor y la embriaguez como método mágico para olvidar viejos romances y reencontrarse con nuevos", la define Bosio.
Esta comedia musical está representada por un elenco integrado por los jóvenes intérpretes del género como Pablo Martínez (ahora en el programa de TV Aliados , antes en Supertorpe ), Flor Benítez, Josefina Scaglione y el mismo Leo Bosio. Todos acompañados en escena por el músico Jano (músico en vivo). "Es un relato íntimamente anónimo entre el que bebe, su historia, la música y la bebida. La necesidad de ahogar las penas en la bucólica compañía de unas copas y en esa alteración, todo puede pasar de una tragedia a una comedia en un solo sorbo. La borrachera, no patológica, como estado de lucidez del alma y de la mente", agrega el director.
La rockola reafirman aquella idea popular de "Tomo para no enamorarme, me enamoro para no tomar". Un bar, un show, el que atiende, la de siempre, el que llega, la que viene y el músico traman la noche, sus destinos. Todos toman, se crispan y conocen, recuerdan y entienden. Estos seres están más lúcidos cuando están más ebrios. El alcohol y la música liberan la emoción y les brindan lucidez. La coreografía es de Seku Faillace, mientras que las canciones son de Hernán Segret, Jano y Flor Benítez. Se presentará todos los jueves, a las 23, en la sala Siranush, Armenia 1353
Fuente: La Nación
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